Aceites de oliva virgen extra solo con las aceitunas obtenidas de una variedad específica de olivo. Este tipo de aceites tienen aromas y sabores característicos propios de la aceituna con la que están elaborados.
En nuestra tienda online encontrarás aceite de oliva virgen extra monovarietal de la variedad picual, de un sabor y aroma más intenso, y de la variedad arbequina, mas suave y equilibrado. Ambos aceites de oliva son premium (cosecha temprana) y por tanto de una calidad excelente.
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Aceite premiado internacionalmente
Cada variedad de aceituna monovarietal aporta una identidad diferente al aceite, creando perfiles sensoriales distintivos.
Características únicas. La elección de una variedad monovarietal es elegir un viaje de sabores y aromas específicos. Por ejemplo, algunos aceites monovarietales pueden tener notas frutales, otros herbáceas o incluso toques picantes, cada uno reflejando las características de la aceituna de la que proviene. Incluso el color también puede variar.
Versatilidad en la cocina. Un aceite monovarietal puede ser la estrella en una ensalada sencilla o el toque final en un plato gourmet. Dependiendo de su perfil, algunos aceites realzan platos de carne con su robustez, mientras que otros complementan perfectamente postres con su dulzura natural. Esta diversidad permite a los chefs y aficionados experimentar y descubrir combinaciones culinarias sorprendentes.
Explora y prueba. Anímate a probar diferentes tipos de aceites monovarietales. Cada uno ofrece una experiencia distinta y puede abrir un mundo de posibilidades en la cocina. Sal de tu zona de confort, descubre cómo un cambio en el tipo de aceite puede transformar completamente un plato y aprecia la rica diversidad que ofrece el aceite de oliva.
El aceite de oliva virgen extra monovarietal reconocido por su carácter intenso y distintivo es el de la variedad picual, una opción excelente para los amantes de sabores marcados y complejos.
Sabor y aroma. El aceite monovarietal picual destaca por su sabor intenso y su perfil organoléptico rico. Presenta notas picantes y amargas equilibradas que lo convierten en un aceite con mucha personalidad. Además, su alta estabilidad lo hace ideal para cocinar, manteniendo sus cualidades incluso a altas temperaturas.
Beneficios para la salud. Uno de los aspectos más destacados de este tipo de aceite monovarietal es su alto contenido de antioxidantes, incluyendo polifenoles y vitamina E. Estos compuestos son conocidos por sus propiedades beneficiosas para la salud, como la protección cardiovascular y la lucha contra el envejecimiento celular. El aceite picual, por tanto, no solo es valioso por su sabor, sino también por sus aportes a una dieta saludable.
Usos en la cocina. Su robustez lo hace ideal para platos que requieren un sabor intenso, como asados, guisos o marinados para carnes. Su resistencia a altas temperaturas también lo hace perfecto para freír y saltear, aportando su carácter único a los alimentos. Además, puede usarse en crudo para dar un toque final a platos como ensaladas o para acompañar panes y quesos.
El aceite de oliva virgen extra monovarietal para los que prefieren sabores más suaves y equilibrados es el de la variedad arbequina. Este aceite se caracteriza por su perfil sutil y refinado:
Perfil aromático. El aceite monovareital arbequina es conocido por su suavidad y su perfil afrutado. Los toques de manzana, almendra y a veces incluso plátano, hacen de este aceite una elección exquisita y delicada. A diferencia de variedades más intensas como la picual, el arbequina tiene un nivel de amargor y picor mucho más bajo, lo que lo hace accesible y agradable para una amplia gama de paladares.
Usos en la cocina. Su delicadeza lo hace perfecto para platos que requieren un aceite que no domine otros sabores. Es ideal para pescados, mariscos y ensaladas, donde su ligereza puede complementar sin abrumar. Además, su dulzura natural lo convierte en un acompañante perfecto para postres como helados o incluso en pasteles.
No olvidar su uso en crudo. Para aprovechar al máximo el sabor y aroma del aceite de oliva virgen extra arbequina, se recomienda usarlo en crudo. Es excelente para rociar sobre platos terminados, como una ensalada fresca, un carpaccio o incluso como un toque final en sopas frías. Este uso realza los sabores sutiles del aceite y permite que su complejidad se aprecie plenamente.
